domingo, 9 de julio de 2017

Pirineo Oriental: Coll de la Creu & Col de Jau (117 km)

Como viene siendo habitual en nuestras vacaciones estivales, las chicas han viajado con nosotros y hemos disfrutado de unos días fabulosos.
Nuestro destino para este año era Alsacia-Vosgos y Bretaña, pero con la furgo siempre te entretienes por el camino :-)

Nuestra primera parada fue Prades, una pequeña localidad situada a los pies del Macizo de Canigó y que nos sirvió de base para realizar una dura e impresionante ruta por el Pirineo Oriental.

Esta zona ya la conocía de cuando hice la Rayd de los Pirineos y la segunda parte de esta etapa me era ya familiar.





DISTANCIA: 115.4km
DESNIVEL ACUM. SUBIDA: 2491m
DESNIVEL ACUM. BAJADA: 2463m
ALTITUD MAX. GPS: 1695m

Como veis es una ruta circular con inicio y final en Prades en la que vamos a disfrutar de una gran etapa pirenaica con un contraste de paisaje muy interesante.
Vamos a superar dos grandes subidas con un par de puertecitos intermedios, por aquello de no perder la costumbre :-)
Es una ruta que transcurre por carreteras muy tranquilas , sólo los primeros 16 km hasta Olette, es dónde vamos a encontrar algo de tráfico ya que la ruta transcurre por la N 116. 
En el Km 8 aprox. hacemos una parada para visitar la preciosa villa medieval de Villefranche-de-Conflent, declarada patrimonio mundial de la UNESCO bajo la denominación de las fortificaciones de Vauban.

Este tramo lo hago íntegramente a la rueda de Iñi para pasar la nacional lo antes posible. En Olette, giramos a la derecha y nos incorporamos en la D4. El tráfico desaparece casi por completo y comenzamos a ascender el Coll de Creu. 

DISTANCIA: 21.7km
DESNIVEL: 1088m
PEND. MEDIA: 5.02%
COEFICIENTE APM: 191
CATEGORÍA: 1ª cat
ALTITUD MAX. GPS: 1722m
ALTITUD CORREGIDA: 1722m


Es una subida larga pero con bastantes descansos, aunque los Km finales vamos a encontrarnos con unos tramos duros, con rampas que rondan el 13% en más de una ocasión. 
En los primeros Km vamos a encontrar muchos tramos de gravillon. Al ir subiendo, no me preocupa mucho, lo único que la bici se agarra mucho y ralentiza bastante. La carretera está muy descarnada en muchos tramos por lo que hay que ir con precaución. 

La parte más espectacular es sin duda la central. La carretera transcurre a lo largo de una cresta entre barrancos, con unas vistas impresionantes. Nos encontramos en el Parque Regional de los Pirineros Catalanes. En una zona protegida y de alto valor ecológico. 





Una vez que pasemos la zona de barrancos, empezaremos a ver indicaciones al Coll de Creu.
Los últimos 4 Km son puerto sin paliativos, ya no va a haber apenas descansos y nos vamos a encontrar con alguna recta realmente dura. 
Reconozco que se me estaba haciendo largo, la cima no llegaba nunca, pero claro, a lo tonto llevábamos 40 km de subida. 




Por fin coronamos el puerto interminable, comemos una barrita y proseguimos la marcha.
Bajamos rápido un par de Km hasta Matemale, dónde nos encontramos un mercadillo fantástico con puestos de lo más apetecibles de diferentes embutidos, quesos, panes....
Pasamos de largo para evitar la tentación y además porque las nubes empezaban a ser amenazantes. 

Aquí giramos para incorporarnos en la D118. Los siguientes 12 km transcurren por un altiplano ligeramente descendente a una altitud de unos 1300 mt con el lago de Puyvalador del Río Aude como compañero de viaje. A partir de este punto comenzamos una bajada rapidísima hasta llegar al cruce con la D17. Este punto, es por donde íbamos mi amiga Renee y yo hace 14 años y volvimos a encontrarnos con Iñiguito, conocido en aquellos días, como el vasco de los Pirineos :-)

A partir de aquí nos espera una sucesión de tres puertos, siendo los dos primeros (Moulis & Aravel) pequeños aperitivos del Jau. 

Col de Jau
DISTANCIA: 10.7km
DESNIVEL: 634m
PEND. MEDIA: 5.93%
COEFICIENTE APM: 114
CATEGORÍA: 2ª cat
ALTITUD MAX. GPS: 1499m
ALTITUD CORREGIDA: 0m


Atacamos el último de la jornada, el precioso Col de Jau. No es un puerto excesivamente duro, pero a estas alturas ya se van notando los Km en las piernas. 
Es una subida muy boscosa y puramente atlántica, además ha empezado a caer un txirimiri, que lejos de molestar se hace agradable. Es increíble el cambio de paisaje desde que hemos coronado el Col de Creu. Hemos pasado del Mediterráneo al Atlántico sin enterarnos. 
No hay apenas tráfico y el ruido del agua es tu compañero de ruta... bueno, hasta que pasa un grupo de belgas y me quitan las pegatinas. Nos saludamos y continúo a lo mío, con mis sonidos del agua y mi respiración. 

Es una subida bastante constante con un par de Km algo más duros. Reconozco que estos km centrales me están costando más de la cuenta, pero ya casi lo tengo y estoy disfrutando. 





Por fin corono el Jau y me viene un Déjàvu de L'Ariégeoise. No hay manera de ver un puerto de esta zona sin niebla, pero tiene su encanto. 

Me pongo el chubasquero y comenzamos el descenso a Prades. 

El paisaje cambia de forma radical y nos vuelve a recibir el Mediterráneo. El canto de las cigarras es ensordecedor. Parece mentira cómo cambia todo de una vertiente a otra. 
Con el concierto de nuestras amigas terminamos el descenso hasta Prades y daremos por finalizada la ruta. 
Un buen día de ciclismo que empezó soleado para dar paso a una amenaza de tormenta que finalmente quedó en una ligera lluvia con algo de niebla. 

¡Cómo nos gustan los Pirineos! 


1 comentario:

  1. Puertacos estos Coll de Creu y Coll de Jau. No esta nada mal para comenzar las vacaciones. Las fotos con niebla por supuesto que tienen su encanto.

    Un saludo . David.

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